Para comprar un carro nuevo, o incluso un usado, puede representar mucha planificación y el reajuste definitivo de tus hábitos de gasto. Debes plantear una estrategia para ahorrar y que te permita establecer un presupuesto, solventar tus gastos mensuales y llevar a cabo el ahorro.

Dentro de las posibilidades que existen, puedes plantear la posibilidad de hacer un gran ahorro para solicitar un crédito. La duda que siempre nos haremos es: ¿Pido un crédito o ahorro para comprar el carro de mis sueños? Pues bien, puedes plantear un escenario en el que te veas beneficiado por los dos recursos. Realizar un ahorro significativo puede representar, a la hora de solicitar un crédito, una disminución en las tasas de tu crédito.

Debes tener en cuenta que, al pagar una mayor parte del pago inicial del automóvil por adelantado, puede reducir el monto del préstamo que solicitas para el automóvil y así se reducen los pagos mensuales. Una cuota inicial hace que el préstamo sea más pequeño y significará pagos mensuales por el vehículo más bajos en el futuro, lo cual se representa en menos cargos por intereses durante la vigencia del préstamo.

Si te ha interesado esta opción y quieres comenzar a hacer el ahorro, ¿cómo lo puedes hacer? Pues bien, estar enfocado en comprar el carro de tus sueños implica conocer el valor de tu automóvil, el costo total y las opciones que te ofrece el concesionario para que hagas la compra, debes considerar los tiempos que te ofrece para el crédito y el puntaje crediticio que tienes para optar a las opciones que te ofrecen.

El acompañamiento del asesoramiento por parte del concesionario debe venir acompañado de tu meta de ahorro. Según las ofertas que te da la casa de ventas debe proyectar el ahorro que vas a realizar, esto es: según el precio que tiene el automóvil en el mercado, debes restar la cantidad que tienes ahorrada o proyectas ahorrar; con un número en mente para la cuota inicial, comienza tu proyecto personal. Es necesario, por tanto, crear un fondo de ahorro para automóviles que te ayude a administrar el dinero que ahorras y realizar un seguimiento de tu progreso.

Para ahorrar dinero y acercarse a la meta propuesta, debes aumentar el monto que ahorras cada semana y reducir los gastos. Si automatizas un pago mínimo a tu cuenta de ahorros cada vez que percibas algún ingreso, reducirás la posibilidad de gastar en otros lugares y también puedes saber exactamente cuándo alcanzarás el objetivo.

Aunque existen diferentes medios para lograr un ahorro significativo, dentro de las opciones que puedes contemplar es la regla 50/30/20, esto representa en términos básicos: emplear el 50% de los ingresos en los gastos mensuales, utilizar el 30% en gastos no esenciales (compras, suscripciones, membresías, etc.) y designar el último 20% en el ahorro para la compra que quieres hacer.

Ahora bien, otra opción que puedes contemplar es que, si tienes un carro usado, lo puedes vender para conseguir una cantidad superior en el momento de comenzar tu ahorro. El proceso es similar al que presentamos anteriormente, no obstante, debes tener en cuenta que el proceso de venta de carro puede tardar, por lo que debes ser consciente de ello.

Por último, debes recordar que las opciones que acá describimos requieren del compromiso personal. El ahorro, el pago de las cuotas y presupuestos deben ajustarse a tus ingresos y responsabilidades. Esto no implica que dejes de soñar con el carro de tus sueños, pero sí es necesario ser consciente y contemplar todas las posibilidades y tiempos para realizar la compra.